sábado, 25 de junio de 2011

Sí, Acepto



Hay ciertas cosas de cierta gente que en cierto momento puede parecer lo más incierto...


O eso o una ola gayfriendly (teniendo en cuenta la aprobación de matrimonios gay en New York) está apoderándose del planeta. Otra explicación no le encuentro.

Ayer por la tarde recibí en la oficina la visita de un compañero de trabajo que se había casado a primera hora de esa mañana (sí, por la mañana, la novia se embarazó y tuvieron que apurar la boda). Me trajo un poco de torta y las fotos del casamiento para verlas.

No soy fan de las bodas pero como se tomó la molestia de llevar las fotos para compartirlas conmigo y se veía la ilusión de recién casado en su cara, ¿quién soy yo para negarme a compartir su felicidad?

Entre foto y foto, aparece mi jefe detrás nuestro y al darse cuenta de qué se trataban las fotos lo felicitó y le hizo el comentario de que ya era hora de que ate el lazo. “¡Pero si sólo tiene 25 años!” pensé…

A todo esto, mi compañero responde de que hacía tiempo ansiaba hacerlo (¿será?) y que lo recomienda totalmente (realmente, ¿será?). Acto seguido, le invita un poco de torta y mi jefe se excusa con un: “No, gracias. Yo ya estoy casado. A él le tenés que invitar para que sea el siguiente”.

¡Un rebote gratuito y sin previo aviso! No sabía qué decir y lo primero que me vino fue un “¡No! Soy demasiado joven todavía. Quiero disfrutar a full y después voy a pensar en eso” Cero convincente, claro. Creo que mi jefe se dio cuenta de mi pésima actuación/justificación, y soltó algo que jamás pensé escuchar de él, que en cierta forma es como un papá para mí:

“No dejes pasar mucho tiempo. Te tenés que casar, no esperes a ser viejo. Total, hoy día hay mucha libertad y no importa si te casás con un hombre o una mujer, pero te tenés que casar…”

Me quedé...

Dicho eso, se excusó de que tenía que retirarse y se fue. Mi compañero tomó a joda el comentario pero yo quedé gratamente sorprendido y con algunas interrogantes, siendo la principal ¿sospecha que soy de la onda? Siempre me encargué de que mi vida privada se mantuviera así, bien privada, en el trabajo.

Y otra de las preguntas que me hago desde entonces, ¿dijo en serio lo del casamiento con “mujer u hombre” o sólo en joda? Conociéndolo como lo conozco y sacando la leve sonrisa mientras lo decía, el comentario tenía mucha seriedad.

Me alivia creer que piense así. Antes de esto él me parecía una persona de cero tolerancia con estos temas pero una vez más queda expuesto que uno nunca termina de conocer a alguien. Contento estoy porque podría decir que ya tengo quién me entregue en el altar pero… ¿y el novio? The hardest part! Jajaja…

1 comentario:

  1. mo diría um ex amigo suburbano que está gordo, viejo y acabado: qué fuerte!

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