sábado, 8 de agosto de 2009

Drop your socks and grab your miniboombox...

¡¡¡Amigooo!!! ¿Qué tal? Yo, resfriadísimo que es lo peor que te puede pasar con el calor de 50° que tenemos. Soy una máquina de echar flemas por doquier... lo único bueno es que me agarró en las fiestas y puedo aprovechar el feriado para reposar y esperar que se cure más rápido así.

Aparte que ando reteniendo líquido y no yendo regularmente de cuerpo. Esto hace que me sienta gordo. ¿Será la creatina? Ya mañana mismo hago un intenso entrenamiento de piernas y cintura y le bajo 4 litros de agua. Es que estoy en carrera contra el tiempo. El sábado es la cena de fin de año de mi trabajo. ¿Te acordás cuando el año pasado me nominaron entre otras cosas como el mejor vestido del año? Bueno, sucede que cuando te nominan a un título así es un halago pero a la vez una responsabilidad y un compromiso ya que este año tengo que superarme a mí mismo. Es como Kylie con sus conciertos. Tengo que sacar algo bueno. Este sábado voy de shopping a ver qué encuentro. De momento estoy frente a la compu, con un calor calcinante y pañuelos en los bolsillos. ¡Un desastre! Comí, comí, comí que da miedo anoche y ahora siento remordimiento de consumidor. To hell with it! Mañana mismo me pongo a dieta de carbohidratos.

Ya habré leído más de 10 veces tu carta. Jojojo!!! Lo que me reí. ¡Te anda dando muy a menudo el Síndrome Centurión! Jajaja... take it easy nomás.

Lo del concierto de Madonna, bueno, por lo que vi en el Youtube fue pura clase, elegancia y estilo pero fue bueno que fueras, para poder decir que estuviste ahí y taparle la boca a muchas locas de por acá.

Y es que el medio siglo con patas (lo leí en el Cliché y me encantó esa descripción) ya está consagrada como vos decís, y en vez de madurar y ponerse sofisticada se pone a hacer rabietas que a su edad ya son ridículas. Tuvo suerte en no romperse nada cuando se resbaló. Me quedo mil veces con la Madonna ochentera hasta la de Ray Of Light. Esta nueva, no me gusta. Más fría. Más calculadora. Parece muy malhumorada. En fin, la menopausia le habrá caído mal.

Es bueno saber que al menos uno de los dos está tendiendo sexo. Yo, en cambio, tengo que sudar alzando y bajando pesas... es que ya sabés cómo son las cosas acá. Y aunque el deseo me hierve y digo que voy a coger con la primera escoba que se me cruce, a la hora de la verdad mi yo interior no deja que me acueste con cualquiera. Es una bendición y una maldición a la vez.

Me pregunto cómo hacen esos que se acuestan con cualquiera, véase Luis Torres y su camada, el Ruco Nice, porque no perdonan nada. Yo ante el primer destello de locura doy un paso atrás. No lo puedo evitar. Es una especie de reflejo, como cerrar los ojos cuando una basura está por entrar en ellos. Es algo automático. Te cuento mi último "trío"...

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